Acciones Vs. Opciones

Aprende las ventajas y desventajas de operar en Acciones vs. operar en Opciones. Te mostraremos porque preferimos las Opciones sobre las Acciones y cómo puede obtener beneficio sea cual sea el movimiento del mercado invirtiendo en Opciones.

Introducción

En el negocio de la inversión en los mercados financieros hay varías formas e instrumentos con los que ganar dinero. La más básicas, y que todo el mundo conoce, es la inversión en acciones.

La inversión en acciones es simple: puedes comprar o vender (ir a largo o a corto) esperando una subida o una bajada respectivamente para ganar dinero, de lo contrario, entrarías en pagos o pérdidas.

Por otro lado, tenemos las opciones que nos permiten operar en los mercados obteniendo beneficio incluso cuando no consigues acertar la dirección del movimiento de un valor, que dicho sea de paso, es imposible de adivinar. En esta lección desglosaremos cada una de ellas y veremos porque en Opcion Delta preferimos utilizar las opciones como instrumento para nuestra operativa.

Acciones

Una acción no es más que una fracción de una empresa y representa una parte del valor total de la compañía. Cuando las adquirimos pasamos a ser “propietarios” de una porción del negocio. Aunque también podemos Venderlas sin haberlas adquirido previamente. Esta es una de las cosas bellas de este negocio.

Comprar Acciones (Largos)

Cuando hablamos de invertir en el mercado financiero, la mayor parte de los inversores solo piensa en comprar acciones de una empresa, que consideran “buena” o con “proyección de crecimiento” a un precio determinado y esperar a que suban para poder venderlas a un precio más alto después. A este tipo de operaciones las llamamos “Compradoras” o “Ir Largo”.

Cuando compramos una acción sabemos que teóricamente esta puede aumentar de valor de manera indefinida, es decir, podrá subir infinitamente. Por el contrario, puede caer solo hasta valer 0. Podemos vender nuestras acciones en cualquier momento que queramos durante las horas de apertura del mercado, y si conseguimos venderlas más caras que el valor de adquisición obtendremos un beneficio.

Comprar acciones es una operativa 50/50, es decir, tenemos un 50% de probabilidades de ganar dinero, y solo lo haremos si el valor de nuestras acciones aumenta. Además, una vez compradas, no podemos hacer nada que no sea esperar al movimiento del precio del activo, estando supeditada nuestra operativa al precio de mercado y al de adquisición.

Por ejemplo: adquirimos 100 acciones de la empresa ABC a 100€ por las que tendríamos que pagar 10.000€. Si cuando las vendas valen 120€, te pagarán por ellas 12.000€, obteniendo 2.000€ de beneficio. Si por el contrario las vendieses a 80€, asumirías una perdida de 2.000€. ¿Bastante simple, no?.

Vender Acciones (Cortos)

Vender acciones (también llamado “Ir Corto”), sería justo lo contrario de lo visto en el punto anterior. Cuando vendes las Acciones a un determinado precio, esperas que estas bajen para poder recomprarlas más baratas y obtener beneficio en esa diferencia.

Y seguro que te estás preguntando: ¿Cómo puedo vender algo que no tengo?

Bueno, en el mercado financiero podemos coger prestadas acciones de un inversor que las tenga compradas (a través de un broker), venderlas al precio de mercado y devolverlas más tarde cuando las recompremos. Si conseguimos recomprarlas a un precio menor que el de venta, obtendremos un beneficio; y al contrario si las recompramos más caras de lo que las vendimos.

Al contrario que la compra de acciones, teóricamente la pérdida es ilimitada y el beneficio limitado a que el activo se vaya a 0. Por supuesto esto es, como decimos, teórico y hay muchos otros factores que entran en juego como por ejemplo el volumen de negociación o los requisitos de margen del broker que estés utilizando.

Para poder llevar a cabo este tipo de operaciones necesitaremos trabajar con un Broker profesional que nos de los permisos necesario para realizar este tipo de operativa.

Igual que en el caso de la compra, la venta de acciones es una operativa 50/50 y debemos acertar la dirección del mercado a fin de poder ganar dinero, en este caso si el valor de las acciones disminuye. Como en la compra de acciones, no hay nada que podamos hacer, que no sea esperar al movimiento del mercado, para mejorar nuestra posición.

Pongamos el ejemplo anterior con la venta de acciones: cogemos prestadas 100 acciones de ABC y las vendemos en el mercado a 100€/acción, obteniendo así un crédito de 10.000€. Si al cabo de un tiempo las acciones bajan hasta valer 80€, recomprarlas te costaría 8.000€, las devolverías y obtendrías 2.000€ de beneficio en la transacción. Si estas acciones valiesen 120€ en la recompra, te costaría 12.000€ recomprarlas para poder devolverlas y estarías perdiendo 2.000€. ¡Justo lo contrario que en el caso anterior!

Opciones

 Como vimos en la lección anterior, las opciones son simplemente un contrato entre dos partes por la compra o venta de un activo a un precio determinado en el futuro. Si quieres conocer más detalles sobre ellas puedes ver la Lección 1: ¿Qué son las Opciones?

Las opciones nos permiten negociar un activo a un precio diferente del cotizado actualmente en el mercado, esta característica nos ayuda a generar estrategias en las que no tengamos que elegir una dirección o intentar averiguar hacia donde va a ir un valor.

Sustituyen la pregunta “¿Dónde creo que está acción va a ir?” por la pregunta “¿A dónde creo que esta acción NO va a llegar?”.

En vez de comprar la acción ABC a 100€/acción y rezar para que suba, podría vender una opción (conocida como opción PUT) que me obligase a comprar 100 acciones a 90€ y recibir una prima por ello. Supongamos que por la venta de esta opción PUT recibo una prima de 3€/acción, o lo que es lo mismo, 3€x100 acciones = 300€. 

Siempre y cuando ABC no baje de los 90€ a vencimiento del contrato de venta, podré quedarme con la prima integra de 300€ que cobré por adelantado. Si por el contrario, ABC está por debajo de 90€ a vencimiento, pasaré a ser dueño de las acciones a 90€/acción, en lugar de a 100€/acción y ¡ADEMÁS ME HABRÉ QUEDADO CON UNA PRIMA DE 300€!.

Incluso cuando ya tengo las acciones podría vender contratos de opciones CALL para reducir nuestro coste de adquisición y poder ser rentable incluso si el precio de las acciones se mantiene o baja un poco. Hablaremos de este tipo de estrategias más adelante.

¿Sigues pensando que las opciones son más arriesgadas que las acciones?

Como ves la inversión con opciones no es una operativa 50/50, sino que la posibilidad de elegir los Precios Strike, la Duración del Contrato y la Prima a recibir, nos da una flexibilidad a la hora de operar que nos permite hacer dinero incluso si nos equivocamos con la dirección.

Además, podemos elegir estrategias con altas probabilidades de beneficio. Esta probabilidad es calculada en función del movimiento histórico de la acción y la volatilidad implícita (veremos más acerca de estos conceptos más adelante). La probabilidad de beneficio operando en opciones es un número conocido que podemos saber antes de abrir una operación. Con las estrategias correctas, que aprenderás a lo largo de los cursos siguientes, verás que puedes hacer dinero si el precio de la acción baja, sube o incluso si se queda lateral.

Por último, la operativa con opciones nos permite utilizar un mayor apalancamiento a nuestro favor para mejorar nuestros beneficios y recudir riesgo al mismo tiempo. Obviamente el apalancamiento es un arma de doble filo que debemos utilizar correctamente o de lo contrario se puede convertir en nuestro enemigo si nos sobre-apalancamos o realizamos malas entradas.

En las próximas lecciones y cursos te enseñaremos como utilizarlo a tu favor para generar mayores rentabilidades sin necesidad de utilizar todo tu capital.